Las tuberías de PVC son una opción popular en plomería debido a su resistencia, ligereza y coste económico. Sin embargo, para asegurar su durabilidad y funcionamiento óptimo, es importante mantenerlas adecuadamente. Una de las principales recomendaciones es evitar el uso de productos químicos agresivos, como limpiadores con cloro o ácido, ya que pueden dañar el material. En lugar de ello, utiliza agua tibia y un detergente suave para limpiar las tuberías y eliminar cualquier acumulación de residuos. También es esencial revisar periódicamente las tuberías en busca de grietas, abolladuras u otros daños que puedan comprometer su integridad. Si detectas algún problema, realiza las reparaciones necesarias de inmediato para evitar fugas. Mantén las tuberías de PVC alejadas de fuentes de calor extremo y evita impactos fuertes que puedan causar daños. Siguiendo estos cuidados básicos, podrás prolongar la vida útil de tus tuberías y mantener un sistema de plomería eficiente.